El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España

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Uno de los grandes ejes de transformación

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La principal misión de este plan trata de descarbonizar las ciudades, logrando disminuir en un 55% las emisiones de CO2 para 2030, así como aumentar la calidad de vida de sus ciudadanos disminuyendo la contaminación auditiva, ofreciendo transportes más seguros y rápidos y mejorando la calidad del aire.

Para ello el objetivo es que los municipios con más de 50.000 habitantes cuenten con zonas de bajas emisiones.

Para esto el plan de recuperación ha diseñado el componente 1 denominado “Plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada en entornos urbanos y metropolitanos”.

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Este plan además de enfocarse en el establecimiento de zonas de bajas emisiones, el despliegue masivo de infraestructura de recarga para impulsar el vehículo eléctrico, también busca impulsar nuevos modelos de negocio que faciliten la transición hacia una movilidad sostenible, donde el transporte público se convierta en una alternativa que desincentive el uso del vehículo privado.

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En este sentido la orden del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana es que los municipios de más de 50.000 habitantes y los territorios insulares adopten planes de movilidad urbana sostenible donde se introduzcan iniciativas que permitan disminuir las emisiones de Co2 para 2023, con medidas para el impulso de la movilidad eléctrica compartida, así como la optimización del uso de la red de transporte público con el apoyo de medidas que fomenten la integración multimodal.

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La movilidad urbana multimodal

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Cabe destacar que es una de las estrategias para dar mayor protagonismo al transporte público en los centros de las ciudades, ya que resuelve los problemas de los ciudadanos a la hora de desplazarse por ellas: la falta de aparcamiento, el acceso restringido a zonas de bajas emisiones, la necesidad de agilizar los traslados o descongestionar el tráfico y mejorar la calidad del aire que respiramos.

Estas iniciativas suponen un escenario muy positivo para los operadores de movilidad que quieran participar en la transición de la era privada del vehículo, a modelos de movilidad compartida.

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Es un momento propicio para incursionar un modelo de negocio cada vez más popular y necesario en las ciudades, donde los ayuntamientos y las administraciones públicas están poniendo todos sus esfuerzos en simplificar los procesos de licenciamiento, y están liberando ayudas económicas para impulsar el lanzamiento de estas iniciativas.

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La digitalización cobra cada vez más protagonismo

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Las soluciones de movilidad sostenible y compartida pasan por ofrecer servicios de alquiler de vehículos por horas o por minutos, y sus diferencias se encuentran a nivel tecnológico. Dependiendo de cuál sea su partner tecnológico y herramienta de gestión, los operadores de movilidad pueden posicionarse de forma muy competitiva en el mercado, ofreciendo modalidades de pago por minuto, por suscripción, e incluso incluyendo en el pricing variables como el consumo de energía del vehículo.

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También podrán contar con analytics avanzadas que les permitirán tomar rápidas decisiones para captar más cuota de mercado y para optimizar la operativa de su flota.

Por otro lado, un buen partner tecnológico será capaz de integrar en una misma plataforma distintas marcas o distintos tipos de vehículos (motos, bicis, patinetes, coches). El secreto aquí es que el vehículo traiga IoT integrado, o adaptar un aftermarket device que permita el control de la ignición, la geolocalización y telemetría, y con esos datos sacar el máximo provecho a la flota.

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En nuestro anterior artículo hablamos sobre la gestión de datos como algo clave para el futuro de la movilidad en las empresas.

Sin duda, los operadores que están apostando por una movilidad compartida y sostenible están dando un paso hacia delante, por el futuro de la movilidad y de las ciudades. Si estás pensando en apostar por estas alternativas, no dudes en contactarnos. ¡Estaremos encantados de ayudarte!